¿CUÁNTO NOS VA A COSTAR A TODOS LOS ESPAÑOLES EL NUEVO FERRY DE ARMAS?

Yo creo que a nadie les cabe la menor duda a estas alturas que desde la privatización de la Compañía Trasmediterránea, en el 2003 si no recuerdo mal, las ayudas y bonificaciones a las navieras, que fueron ocupando el espacio de la centenaria compañía, ha sido un agujero sin fondo donde todas las administraciones, comunidades autónomas y municipios han ido dando millones como el que reparte caramelos en la puerta de un colegio. 

Que los fondos de la UE y estas ayudas son ilegítimas está absolutamente claro porque, como decía en mi artículo anterior, la privatización de Trasmediterránea, una empresa saneada, con buenas unidades y rentable, fue el mismo despropósito que si al bueno de Aznar le hubiese dado por privatizar la RENFE y que en vez de tener ese AVE maravilloso tuviésemos TALGO pero envejecido, con los cuartos de baño atascados y despidiendo un repugnante hedor, sin que cerrasen las puertas mientras circulaban por las vías, con los pasajeros sentados y durmiendo en el suelo, y que  estropearse o que hubiese descarrilamientos no fuese algo sorprendente. 

Con una deuda que puede superar los mil quinientos millones de euros, emitiendo unos bonos siniestros en Berlín y con una naviera formada en su mayoría por chatarra que no se sabe ni cómo está flotando, la pregunta no puede sorprender a nadie: “¿Cuánto nos va a costar el nuevo ferry de Armas? 

No podemos continuar así. Hoy amanecíamos con la noticia que se le reembolsan otros 4,5 milones a Fed Olsen por “bonificaciones” que no deja de ser un “suma y sigue” a este despropósito y un insulto a la inteligencia humana y a los que sabemos algo más de barcos que los que han sido propietarios de la Compañía Trasmediterránea desde que se privatizó y que convirtieron el digno negocio naviero en una burda especulación y “recolecta” de millones en ayudas y “bonificaciones” 

Rafael Rosselló Cuervas-Mons 

Capitán de la Marina Mercante