Carta al Presidente del Gobierno 19/08/2019

Excmo. Presidente en Funciones: 
Me pongo nuevamente en contacto con Vd para ver si tendría la amabilidad de resolverme unas dudas que me impiden dormir. Obviamente, soy consciente que si recibo respuesta será a través de sus asesores, pero, aun así, sería para mí esclarecedor, ya que al mismo tiempo tendría la oportunidad de que un personal altamente cualificado y con muchísima experiencia me “ilustrase”. 
Llevo casi tres años denunciando irregularidades en ciertas navieras que acaparan nuestras rutas de interés general. En estas denuncias advertí que en el mundo marítimo cualquier anomalía que pudiese afectar a la flota se convertía en una irresponsabilidad que podría acabar en tragedia. Los siniestros marítimos de estas navieras se han ido repitiendo mientras que yo denunciaba la inoperancia de la Dirección General de la Marina Mercante, de la Inspección de Buques y de la Fiscalía, que le pasó "la pelota" a la Fiscalía Anticorrupción para que “sistemáticamente” archivase las denuncias. 
Mis preguntas con respecto a este asunto son las siguientes: 
¿Se han dado cuenta ya que los problemas financieros en una naviera acaban por tener un reflejo en la seguridad marítima y, por ende, en la seguridad de las vidas humanas?, ¿piensan hacer algo al respecto? 
En el caso, y que Dios no lo quiera, que ocurra una desgracia seria, ¿se podrá exigir responsabilidades a alguien, o vamos a seguir con la política del “corporativismo” y de la inmunidad de jueces, fiscales y políticos?, porque no cabe la menor duda de que hay algo que no está funcionando y yo me temo que es porque ocupan puestos de profesionales funcionarios, y con ello incluyo a jueces y fiscales que lo son sin haber aportado ninguna experiencia y sin ser elegidos por nadie, al margen de su “politización” tan obscena que hasta presumen de pertenecer a asociaciones de jueces y fiscales con ideologías políticas al mismo tiempo que alardean de “independencia”, algo absolutamente contradictorio como hemos podido ver. 
Open Arms está invadiendo competencias que corresponden únicamente al Estado, me refiero al Salvamento Marítimo, ya que, por la misma regla de tres, mañana puede aparecer otra ONG del Sr. Soros, u otro "filántropo", que ponga patrullas para luchar contra el contrabando. Pero, es más, es que en este caso está más que claro que se dedican profesionalmente a introducir indocumentados africanos en Europa, porque en Túnez parece que si los dejan allí no cobran, ya que su obsesión es con Europa. Para ello cuentan con la complicidad de políticos y jueces que “retuercen” el concepto de “salvamento marítimo” para imponer que aceptemos, con la tapadera del “buen samaritano”, a individuos que acaban instalándose en nuestro país a los que hay que mantener y, por si fuera poco, ejercen la venta de falsificaciones hundiendo los pequeños comercios y convirtiendo nuestras ciudades en verdaderos mercadillos. Mi pregunta es, ¿hasta cuándo hay que seguir manteniendo y permitiendo a estas ONGs que se dedican a traficar con seres humanos, y cuándo vamos a repatriar a estos individuos?, ¿o es que se quedan ya el resto de su vida viviendo a costa de todos los españoles mientras que peligran las jubilaciones y se retiran ayudas para darsela los que vienen de fuera? Por cierto, ¿quién ha dado autoridad a un Gobierno para regalar nuestra nacionalidad?, porque si somos tan demócratas, yo creo que hay ciertas decisiones que habría que consultar y, que yo sepa ni en Marruecos, ni en Asia, ni en África en general se da la nacionalidad a nadie por vivir o haber nacido allí si no eres hijo de un nacional, y en muchos casos si ambos padres no lo son, ¿o esta “partitocracia” se reduce a ir votar cada cuatro años e intentar averiguar con qué algoritmo se han contabilizado los votos? 
Por último, en cuanto a las preguntas. Se ha retenido a un petrolero iraní en la Bahía de Algeciras, y en este caso como profesional que soy voy a hacer una reflexión. 
Hay una cantinela que se utiliza desde la época de Franco que es muy recurrente para desviar la atención de otros problemas, y es hasta coherente para absolutos ignorantes: la famosa frase de “Gibraltar español”; para muchos es como un afianzamiento de ese patriotismo descafeinado y para otros es válido porque anhelan un Gibraltar barriada de la Línea y con Top Manta en Main Street. Obviamente, ni unos ni otros tienen muchas luces, pero vamos a lo que interesa. 
Gibraltar, como todos los territorios ribereños, y por el Tratado de Jamaica, sí tiene aguas territoriales por mucho que los indocumentados lo nieguen. Y es que dichos “zotes” alegan que el Tratado de Utrecht no las contempla, algo absolutamente cierto, ya que en 1715 no existía ese concepto, como tampoco había “espacio aéreo”; dicho esto, en la época de Franco donde había personas preparadas y serias gobernando el país, nos guste o no, porque esa es la verdad, y se lo explico porque Vd ni había nacido, se colocaron las boyas que separan dichas aguas territoriales de las españolas. Es decir, por encontrarse dentro de una bahía de otro país no se pueden imponer las doce millas. Pero, es más, es que realmente Gibraltar, que tiene sólo una franja por las zonas E y W, ya que en el Sur está el Estrecho de Gibraltar, “derecho de paso inocente”, no tiene capacidad ni técnica ni jurídica de retener a ningún buque; es más, en Derecho Internacional Marítimo lo que ha ocurrido es una absoluta “aberración jurídica”. Por lo tanto, mi última pregunta: ¿Vamos a seguir consintiendo que Gran Bretaña invada espacios y competencias que no tiene? 
Espero, Sr. presidente en funciones, poder ser atendido y que mis preguntas no le hayan resultado impertinente, pero yo sólo me sé explicar hablando claro, como decían en mi pueblo y, por otro lado, estoy como muchos españoles cansado ya de tanta hipocresia de lo políticamente correcto. 
Reciba un saludo muy respetuoso y cordial. 
Rafael Rosselló Cuervas-Mons 
Capitán de la Marina Mercante   

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